Hoy ha amanecido El Valle del Jerte de un color anaranjado, en un principio pensé que se debía a una nube de pimentón de la Vera que envolvía el pueblo de Casas del Castañar, esto como se puede comprobar es usar el sentido del humor con las distintas situaciones atmosféricas que vivimos en estos últimos tiempos. Enseguida llegué a la conclusión que las noticias de los medios de comunicación nos habían comunicado que una borrasca traería polvo en suspensión a la región de Extremadura procedente del desierto del Sahara, no importaba, el Valle seguía igual de bonito; naranja, marrón o verde. La verdad es que esta nube ha conseguido que los árboles, y caminos se transformen en colores diferentes y que la esperada flor del cerezo que empieza a aparecer en estos momentos se tiña de un naranja plomizo que para algunos se nos antoja radiante y bellísima.
Yo invito a que lo visiten a pesar de esta primavera fluctuante que nos sorprende cada día y podrán, comprobarlo desde la terraza de la casa rural Valle del Jerte El Capricho.